Una multitud se ubicó cerca al auto en el que Cristina
Fernández de Kirchner, vicepresidenta de Argentina, regresaba a su hogar. Un
hombre se aproxima a la funcionaria con un arma que nadie se había dado cuenta
de que tenía. Un disparo directo al rostro que, afortunadamente, no salió como
el asesino esperaba.
La escena del intento de magnicidio ha quedado grabada y
dado la vuelta al mundo por el desenlace fatal que pudo haber tenido, además de
evidenciar las fallas en el equipo de seguridad de la exmandataria.
En nuestro país, esta escena recuerda al asesinato del
presidente Luis M. Sánchez Cerro en 1933. Cuando realizaba revisión a las
tropas que iban a combatir en la selva por el conflicto con Colombia, un
militante aprista le disparó. Esto ocurrió en el antiguo hipódromo de Santa
Beatriz, lo que hoy es el Campo de Marte, en Jesús María.
Magnicidio de Sánchez
Cerro: ¿cómo ocurrió, qué pasó antes y después de su asesinato?
Luego de que el presidente recibiera un agasajo en el
hipódromo, una banda de músicos anunció su salida del recinto. Alrededor de 200
personas estaban en la tribuna oficial de la pista de carreras para presenciar
la salida del jefe de Estado.
Sánchez Cerro saludó militarmente y subió a su auto, que
estaba completamente descubierto. Debido a los saludos del público, el vehículo
disminuyó la velocidad. La lenta marcha hizo más fácil que el aprista Abelardo
Mendoza Leyva disparara.
Fueron varios los tiros que recibió el gobernante, lo que
ocasionó que dos horas después falleciera en el Hospital Italiano.
De inmediato, la tropa presente lo abatió; sin embargo, esto
trajo más dudas, ya que no se tuvo información sobre quién lo habría contratado
o si había actuado bajo su propio criterio. El partido aprista negó su participación
en este magnicidio.
Luego se supo que fueron un total de cuatro personas las que
dispararon contra el presidente, pero no se conoció sus identidades, puesto que
todos los sospechosos fueron liberados.
El Congreso escogió a Óscar R. Benavides para terminar el
período de gobierno de Sánchez Cerro pese a que este atentó contra la
democracia al dar un golpe de Estado a Guillermo Billinghurst en 1914 y, en
1936, no reconoció el resultado de las elecciones que dieron como ganador a
Luis Antonio Eguiguren Escudero, por lo que Benavides gobernó tres años más.
Datos biográficos de
Luis M. Sánchez Cerro
Nacido el 12 de agosto de 1889 en la ciudad de Piura, el
general Luis M. Sánchez Cerro, ingresó a la Escuela Militar de Chorrillos en
1906, donder permaneció durante 4 años. Tras egresar como subteniente de la
división superior, sirvió en distintos cuerpos del Ejército, fue enviado a
Sullana a incorporarse a un regimiento que guardaba la frontera del norte,
luego a Sicuani como oficial del regimiento número 15 de Infantería.
Asciende a teniente en 1912 y fue transferido al Batallón de
Ingenieros hasta el 4 de febrero de 1914. Formó parte de la revolución que
derrocó al gobierno de Billinghurst; no obstante, fue hospitalizado tras ser
herido. Ascendió al grado de capitán, fue designado como adjunto militar en
Washington y permaneció en Estados Unidos hasta 1916. A su regreso al Perú, fue
parte de la Infantería y ocupó la jefatura provincial de Carabaya.
En 1922, Luis M. Sánchez Cerro fue nombrado juez sustituto
en el Cusco, donde se expresa contra el presidente Leguía, pronunciamiento
militar que fue develado, por lo que lo detuvieron y encerraron en la solitaria
isla de Taquile en el Lago Titicaca, pese a la gravedad de sus heridas.
Menos de un año después, fue enviado a España, donde se
alista en el ejército de ese país y participa en la Guerra de Marruecos durante
14 meses. También visitó Italia y Francia, haciendo cursos en diferentes
dectros de estudio.
Retornó al Perú en enero de 1929, fue ascendido al grado de
teniente coronel y se le nombra comandante del Batallón de Zapadores número 3
de la Guarnición en Arequipa. En esta ciudad se pronunció contra el régimen de
Leguía y lo derrocó. Luego de la caída del ochenio llegó a la capital para organizar
una junta de Gobierno.
En marzo de 1931, el Gobierno convocó a una junta de
notables en Palacio, pero Sánchez Cerro depone el poder y abandona la casa
presidencial para viajar a Europa. Poco tiempo después, decide regresar al país
, pero su ingreso fue impedido por Samanez Ocampo, por lo que permaneció en
Panamá.
Una vez en la patria, se iniciaron las elecciones por la
presidencia de la República. El comandante Sánchez Cerro encabezó el Partido
Unión Revolucionario, con el que triunfó abrumadoramente en los comicios del 11
de octubre de 1931. Se convirtió en jefe de Estado ese mismo año.