Tras casi un año sin nadie a la cabeza de Perupetro —agencia
estatal encargada de los contratos de exploración y explotación de
hidrocarburos— la llegada de Isabel Tafur a la presidencia del directorio
representa una oportunidad para fortalecer a la producción nacional.
De acuerdo con Enrique Bisetti, exviceministro de
Hidrocarburos del Minem, Tafur posee la experiencia necesaria para evitar el
colapso de la industria local —encarnizada por Petroperú— y, por lo tanto, debe
alejarla del afán privatizador del Congreso y de la propia Perupetro, que
pretenden estropear la llegada de la empresa estatal a la administración de los
lotes de Talara luego de 30 años.
¿Por qué peligra la industria local?
Es preciso recordar que son seis las operaciones de Talara
cuyos contratos están por expirar desde octubre del próximo año hasta mayo del
2028: Lote V (Unna), VII/VI (Sapet), Z-2B (Savia), X (CNPC), II (Petromont) y
XV (Petromont) (ver infografía). Una vez vencido el plazo, deben regresar al
seno del Estado a través de Petroperú.
Sin embargo, desde el Congreso se busca —sin consenso alguno
entre los parlamentarios— extender la concesión a los privados por otros diez
años más; mientras que desde Perupetro apuntan a dividir las parcelas en dos:
lote 204 y 205, dándole a Petroperú en este caso un margen de participación de
hasta el 25%.
“Al término de los 30 años (con los privados) los lotes de
Talara tienen que volver a su dueño original. Significaría una inyección muy
positiva para los resultados económicos y financieros de la empresa (Petroperú)
que ahora está con problemas financieros”, señaló Bisetti a La República.
Cambios a priorizar
Jorge Manco Zaconetti, investigador de la UNMSM, considera
urgente que Isabel Tafur “cambie el timón” con el que se maneja Perupetro, ya
que el gerente general de dicha agencia, Daniel Hokama, “quiere licitar ya” los
lotes de Talara contraviniendo a lo que determina la ley.
Así, advierte que no se cedan a las presiones constantes de
la firma china CNPC respecto al lote X, que en tres décadas apenas apostó por
un pozo exploratorio que genera riesgos.
“Desde 1997 se extrajeron 114 millones de barriles y ahora
solo quedan 52 millones de barriles en reservas probadas. Han ido a la segura,
y el señor Hokama quiere favorecer a los privados dándole un 20% a Petroperú
como socio minoritario. Es un grave error”, añadió.
Manco Zaconetti precisa que parte sustancial de la crisis de
Petroperú se explica por tener que comprar a precios internacionales el
petróleo incluso por el que produce; y pese a iniciar la operación comercial de
la Nueva Refinería de Talara a fin de año, si no se entregan los lotes a
Petroperú, no habrán cambios sustanciales.
“Es fundamental fortalecer a Petroperú. Esperemos que así
sea porque hay poderosos intereses económicos de los lobbystas, la Sociedad
Peruana de Hidrocarburos, la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía
(SNMPE) y las empresas. Están condenando a Petroperú a ser una empresa
refinadora solamente”, concluyó el especialista.
“Campodónico se fue por rechazo del MEF y Minem”
Hace unos días, Humberto Campodónico renunció a la
presidencia de Petroperú en un agudo momento financiero para la empresa, que
recibió un aporte de capital de S/4.000 millones del Tesoro Público.
“Los esfuerzos hechos para enrumbar a la empresa no habían,
finalmente, tenido el desenlace esperado”, señaló a La República.
Según Manco Zaconetti, la verdadera razón de la salida de
Campodónico fue la negativa recibida por los titulares del MEF (Kurt Burneo) y
del Minem (Alessandra Herrera) ante su plan de acción que buscaba ratificar el
regreso de Petroperú a Talara.