Luego de la negativa de Abraham Siles y Mónica Rosell a integrar la JNJ, esta institución se queda con el mínimo de cinco integrantes necesarios para tener quorum y tomar acuerdos. Si uno de ellos se enferma, no podrían votar y decidir la destitución de Patricia Benavides.
La Junta Nacional de Justicia (JNJ) se queda con solo cinco
integrantes, tras la declinación de los consejeros suplentes Mónica Rosell
Medina y Abraham Siles Vallejos para integrar este organismo autónomo que se
encarga de elegir, nombrar, evaluar, ratificar y destituir a los jueces y
fiscales del país.
Esta situación la pone al borde de la inanición, del colapso,
de la imposibilidad de cumplir su importante rol constitucional, pues cinco es
el quorum mínimo para tomar decisiones. Los integrantes que siguen en la JNJ
son Antonio de la Haza Barrantes, actual presidente, María Zavala Valladares,
Imelda Tumialán Pinto, Guillermo Thornberry Villarán y Marco Falconí Picardo.
Si uno de ellos se ausenta por motivos personales o de
salud, la Junta queda paralizada. Es lo que sucedió este martes, 30 de abril de
2024, cuando Thornberry Villarán pidió licencia por motivos de salud y el pleno
se redujo a cuatro miembros. En este caso, no podría votar la destitución de la
fiscal de la Nación suspendida, Patricia Benavides.