Pudieron despedir a sus familiares luego de 38 años.
La Fiscalía Penal Supraprovincial Transitoria Especializada en Derechos Humanos e Interculturalidad de Apurímac, restituyó restos óseos humanos a familiares en la Comunidad de Osqollo, distrito de Cocharcas y provincia de Chincheros, luego de 38 años de ser ejecutados por Sendero Luminoso fueron identificados tras pruebas científicas.
Los hechos corrieron en la zona de Osqollo, el 28 de julio
de 1986, cuando diecisiete miembros de la organización terrorista Sendero
Luminoso incursionaron violentamente en la vivienda de Julia Ortiz Chilingano,
que estaba con su hijo Gerardo Acevedo Ortiz y otros familiares.
La señora Julia Ortiz Chilingano preguntó a los subversivos
donde condujeron a su yerno Máximo Silva Osis, los subversivos le dispararon en
la cabeza con un revolver, de igual forma le dispararon a su hijo Gerardo
Acevedo Ortiz sindicado de soplón.
Posteriormente, los familiares fueron amenazados de muerte
para que no denuncien lo ocurrido, ante la falta de presencia del Estado en la
zona los testigos callaron por mucho tiempo.
La ceremonia estuvo a cargo de la fiscal, Eliana Galindo
Campos, junto con las autoridades locales del distrito de Cocharcas y la
participación virtual de la fiscal superior titular, Janet Raquel Cárdenas
Manrique Coordinadora Nacional de la Fiscalía Superior Penal Nacional y
Fiscalías Penales Supraprovinciales Especializadas en Derechos Humanos e
interculturalidad.
Finalmente, el fiscal provincial, Iván Soto Pareja indicó
que en próximas semanas se realizaran diligencias similares en otras provincias
y distritos de Apurímac.