Abancay, 20 de mayo de 2025.- Con profunda indignación y dolor, los familiares de Gladys Cáceres Ramos realizaron un plantón en la Plaza de Armas de Abancay para exigir al Ministerio Público que acelere y profundice las investigaciones en torno a la trágica muerte de la madre y su bebé de tan solo ocho meses, ocurrida en el interior de un hotel. En el mismo hecho, sobrevivieron dos niñas de 8 y 10 años, hijas de la víctima, quienes hoy enfrentan la orfandad.

Según denunciaron los deudos, Gladys era víctima de maltrato físico y psicológico por parte de su conviviente, identificado como Mario Juro Arana, quien el mismo día del suceso la habría desalojado de la vivienda familiar, dejándola en situación de extrema vulnerabilidad junto a sus tres hijos.

Durante la protesta, el hermano de la fallecida relató que, tras ser echada de su hogar, su hermana tomó la fatal decisión de quitarse la vida y la de sus hijos, al no encontrar salida al sufrimiento que enfrentaba. La tragedia, según dijeron, fue el resultado de años de maltratos, amenazas y abandono.

Los familiares también señalaron que Mario Juro, trabajador de una panificadora, no solo maltrataba a Gladys, sino que además hacía trabajar a las dos niñas, quienes eran sus hijastras. Actualmente, ambas menores se encuentran bajo el cuidado de su abuela materna, con el apoyo de toda la familia.

Los deudos exigen una sanción ejemplar contra el presunto agresor, a quien responsabilizan moralmente por el desenlace de los hechos que dejaron a dos niñas en la orfandad.

El Sindicato de Trabajadores de Construcción Civil de Abancay, del cual el hermano de Gladys es miembro, expresó su total respaldo y solidaridad con la familia. A ocho días de la tragedia, el gremio acompaña este pedido de justicia y condena los actos de violencia que afectaron a la víctima y a sus hijas.