En el fútbol europeo no todo son trofeos dorados y cheques millonarios. En la Superliga de Dinamarca, el defensor francés Maxime Soulas, de 26 años y jugador del SønderjyskE, fue protagonista de una de las escenas más insólitas del fin de semana.

Tras ser elegido como el mejor jugador del partido en la victoria 3-2 de su equipo sobre el Nordsjælland, Soulas recibió un premio muy poco convencional: 55 kilos de papas frescas. El peculiar galardón fue entregado por uno de los patrocinadores del club, que optó por destacar la producción local con este regalo "de la tierra".

Las imágenes del jugador posando sonriente junto a su inesperada recompensa, e incluso un video donde se ve cómo las papas son llevadas al campo en una carretilla, se hicieron virales en redes sociales, provocando una avalancha de comentarios y carcajadas.

"¡No es el Balón de Oro, pero igual alimenta!", bromeó un fanático en X (antes Twitter), mientras que otros elogiaron el sentido del humor del club y la originalidad del premio.

Una historia que demuestra que, en Dinamarca, el fútbol también se juega con frescura… y sabor a papa.