Exigen intervención urgente de la Contraloría ante presunta colusión, mala ejecución y riesgos sanitarios
Andahuaylas, 11 de junio 2025.- A pocas semanas de cumplirse el plazo oficial de ejecución, la obra de mejoramiento del servicio de agua potable y alcantarillado en la comunidad de Unión Chumbao, ejecutada por la Municipalidad Distrital de San Jerónimo, ha generado una ola de indignación entre los vecinos, quienes denuncian graves deficiencias técnicas, riesgos sanitarios y presuntos actos de colusión entre autoridades y el equipo responsable del proyecto.
La obra, valorizada en S/ 3,540,660.39, contempla la
instalación de más de 5,000 metros de tuberías y 254 conexiones domiciliarias,
beneficiando teóricamente a más de 300 pobladores. No obstante, los residentes
afirman que la realidad dista mucho del discurso oficial difundido por el
alcalde Sabino Portillo, quien promovió el proyecto con entusiasmo en actos
protocolares.
Principales irregularidades denunciadas:
Vecinos de Unión Chumbao, frustrados por lo que consideran
una ejecución deficiente y sin supervisión, enumeraron una serie de fallas
estructurales advertidas desde el inicio y que hasta ahora no han sido
corregidas:
Conexiones domiciliarias con tuberías nuevas dobladas o
quemadas.
Instalaciones sanitarias mal conectadas y de baja calidad.
Observaciones técnicas ignoradas por el equipo supervisor.
Cortes arbitrarios del servicio de agua potable, algunos de
más de 48 horas, incluso en fines de semana.
Zanjas abiertas sin señalización ni rutas alternas, causando
accidentes a niños y adultos mayores.
Redes de alcantarillado mal ejecutadas, con serias dudas
sobre su durabilidad y operatividad.
Uno de los hechos más alarmantes es que las redes de
desagüe, aún sin ser probadas adecuadamente, ya están siendo conectadas a la
red existente, lo que ha provocado atoros frecuentes y el retorno de aguas
servidas a las viviendas. Esta situación representa un riesgo directo para la
salud pública, vulnerando el derecho de los vecinos a vivir en condiciones
salubres.
Ampliación sospechosa y posible colusión
La situación se agrava con la posible solicitud de
ampliación de plazo y presupuesto, pese a que el contrato establece 210 días
calendario. Para los vecinos, esta ampliación sería injustificada y podría
encubrir un sobrecosto deliberado.
Asimismo, se denunció que algunos representantes del JASS
(Junta Administradora de Servicios de Saneamiento) del barrio estarían
coludidos con los responsables de la obra, encubriendo las irregularidades en
lugar de exigir las correcciones necesarias.
“Nos sentimos burlados. Esta obra que debía mejorar nuestra
calidad de vida ha traído más problemas que soluciones. Exigimos la
intervención inmediata de la Contraloría General de la República antes de que
se apruebe una ampliación que solo beneficiaría a los responsables de este
desastre”, expresaron vecinos durante una reunión comunal.
Pese a las declaraciones de la gestión municipal reiterando
su compromiso con el desarrollo de zonas rurales, este caso pone en duda la
capacidad de ejecución, fiscalización y transparencia de los proyectos públicos
en el distrito. La ciudadanía exige que las promesas no se queden en palabras y
que se sancione a los responsables de lo que podría constituir un grave
perjuicio técnico, económico y social para la comunidad.